Por Graciela Gomez
Martes, 20 de Abril de 2010 11:34
La desestabilización de cerebros que produce poner al yuyo y al veneno en el tapete mediático parece que a falta de neuronas y testosteronas suficientes para callar la réplica a lo indefendible, es realmente desopilante.
Resulta que la tabla de surf de los K, según sus detractores, es el yuyito, y en ése odio-amor con el gobierno reconocen que el futuro económico del país sigue asegurado por la cosecha record del poroto.Que los chinos se niegan a comprarlo pero van a llevarse todo con plaguicida o sin él y no hay forma de llenar el bolsillo del agronegocio sin llenar también el arca-k.
Paradógico, no?
Resulta que ésta medicina alternativa o terapia complementaria, pareciera que quiere alinearse en las tropas sojeras.
Siendo ella, al igual que la autorización del gen con resistencia al glifosato, carente de estudios confiables y falta de pruebas feacientes sobre su inofensividad. Ésa pesudociencia es criticada por la medicina oficial por carecer de estudios, por falta de pruebas sobre su efectividad y de ser una terapia escasamente probada para usos clínicos.Amén de la peligrosidad de causar hipervitaminosis.
No conformes de envenenarnos con plaguicidas también pretenden alimentar frankestein argentinos a fuerza de moléculas. La falacia de alimentar al mundo con forraje se corrige comiendo sano y para ello hace falta producir sano.
Ni buenas prácticas,ni pseudociencia.La ciencia necesita MAS CIENCIA para palear las debilidades y falencias que tiene la actual.
La primera víctima de ésta guerra fué la verdad, pero nunca encontraron su cuerpo.Se sospecha que los soldados verdes la han rescatado malherida.Pero sigue luchando por su vida, para salir a la luz.
Para armar la próxima columna ,pida ayuda al genetista de Georgia y sueñen ambos con la alfalfa RR al compás del ritmo de Soda Stereo.Oye,"Te hacen falta vitaminas-minas"
Fuente: Asociación Argentina de Periodistas Ambienales (AAPA)
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