Por doctora Graciela Gómez7 de julio de 2011
"Nuestro gran problema es la resistencia al consumo de transgénicos pero creemos que este es un tema que se va a ir clarificando con el tiempo", sostiene el vicepresidente de Monsanto Latinoamérica Sur, Pablo Vaquero. La abogada experta en temas ambientales, Graciela Cristina Gómez, le responde en BWN Patagonia.
Habla de los consumidores europeos, obvio, allí detestan los transgénicos y están prohibidos. Es por ese motivo que van a los países donde la legislación puede ser vulnerada y no hay restricciones .La OMC presiona a Europa para que consuma transgénicos. El gobierno griego anunció una extensión de su prohibición a las semillas de maíz transgénico de Monsanto, también Austria, Hungría y Polonia, la declaración de 172 regiones europeas como Libres de Transgénicos , y la moratoria de 5 años decidida en Suiza ,son algunas muestras del creciente rechazo a los productos OGM en la UE.
Otra traba es el etiquetado de los alimentos, en la UE es obligatorio, en cambio la Argentina no tiene esas normas ni EEUU porque eso es una pérdida de ventas que no están dispuestos a enfrentar. Aquí nos venden golosinas y alimentos de todos tipo donde usan harina de soja para abaratar los costos, sin embargo la etiquete nada dice sobre el contenido. Eso es una clara violación a la Ley de Defensa del Consumidor.
Respecto a las patentes, perdieron la demanda contra Argentina y también en la UE donde pretendían cobrar regalías hasta de los productos derivados de sus inventos transgénicos , pero la justicia les dio la espalda nuevamente.
En EEUU abusan y se limitan a pagar multas por la continua violación a los acuerdos a los que llegan con los jueces sin respetar siquiera la prohibición de no sacar al mercado productos que carecen de investigación suficiente sobre la seguridad de su consumo, algo que sucedió con la remolacha azucarera. Creo que las trabas que Europa le pone de seguido es un arma mortal y que a pesar del lobbie que presiona a los diputados del Parlamento Europeo, el primer mundo se resiste a comer la basura que los países emergentes aprueban sin pedir ningún tipo de estudios adicionales. Ese es su negocio.
Van a seguir invirtiendo en la medida que el Senasa apruebe los nuevos eventos cada vez más peligrosos que llamamos "apilados" porque esa nueva soja RR2 ya no depende solo del glifosato sino de mezclarla con 2-4-D, y Dicamba, de aquí a 2013 venenos más potentes serán esparcidos sobre nuestras cabezas.
Cuando se refiere al algodón en el norte es porque ya posicionó en Chaco el algodón transgénico que es un fracaso en la India y así como sucedió con el arroz clearfield experimentado en las arroceras de Chaco , así van a usar de laboratorio a Chaco con el algodón.
Ellos necesitan una legislación a su medida en nuestro país, ya es muy permisiva, pero necesitan más ventajas y los legisladores parecen muy complacientes a la hora de tratar el tema fumigaciones".
Lamentablemente el granero del mundo es el basurero del mundo, donde el poder de la renta es el forraje para cerdos.-
Graciela Gómez, escribana y abogada ambientalista
BWN Patagonia
(*)Nota completa que fue respondida, en este enlace: http://www.on24.com.ar/nota.
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