Recen por él. (Foto Dra Graciela Gomez con el Papa)
Un grupo de científicos ambientalistas denuncian al Nuncio Apostólico Emil Paul Tscherrig por denegar un pedido de audiencia al papa Francisco, luego de que el Sumo Pontífice haya recibido el año pasado a un número reducido de ese colectivo en una de las audiencias públicas de Plaza San Pedro.
Tscherrig es acusado de “obstruir” la comunicación con el Papa. El Vaticano ofreció, en cambio, una reunión con Peter Turkson, presidente del Pontificio Consejo de Justicia y Paz, que fue rechazada por el grupo de científicos y abogados de distintas nacionalidades.
Una de las integrantes del grupo, la abogada ambientalista argentina Graciela Gómez, señaló a NOVA que, pese a que hace dos meses presentaron un escrito en la Nunciatura argentina, la carta al Papa nunca fue entregada. “Quieren impedir que nos reunamos con Francisco para tratar el tema de los Organismos Modificados Genéticamente (OMG) y llevarle documentos”, acusó.
Gómez fue una de las que participó del encuentro con el Pontífice el año pasado. Ahora sostiene que “desde el Vaticano nos ofrecen reunirnos con ese Concejo, pero no con el Papa, a lo que nos negamos rotundamente”.
La letrada agregó que el grupo, de mayoría italiana, posee un documento del año 2009 en el que Vaticano, aconsejado por científicos pro-OGM, redactó una manifestación a favor de lo que ella llama un “genocidio, creyendo que es la salvación para el hambre del mundo”.
“En Argentina hay un gran escándalo por la supuesta carta falsa del papa Francisco enviada a nuestra presidenta (Cristina Kirchner)”, dijo Gómez, y aseguró que “lo mismo sucedió con nuestra misiva”. “Esperamos la renuncia o el despido de alguno, hay una interna entre los obispos y los secretarios que quedó al descubierto”, diagnosticó.
“Nuestra carta nunca fue entregada y hay una clara animosidad para evitar que nos reunamos con el Papa”, enfatizó Graciela Gómez, que cuestionó que el Consejo de Paz y Justicia del Vaticano, que encabeza Turkson, haya felicitado el año pasado a los ganadores del Premio a la Alimentación, Monsanto y Syngenta. De esta manera, cuestionaron, los galardonados quedarían equiparados a los científicos que se oponen al modelo agropecuario.
“La soberanía alimentaria, los envenenamientos masivos y los daños en la salud humana que aquejan en el mundo y a poblaciones enteras no deben soslayarse”, dijo Gómez, que sostuvo que Argentina “es comparable a una Auswitch a cielo abierto, víctima del envenenamiento masivo con agrotóxicos, usados en la tan ‘inofensiva’ carrera de los OGM que tan livianamente apoyó en el año 2009 el Vaticano”.
Gómez asegura que el texto del Vaticano que está en poder del grupo de científicos “derrocha falacias a lo largo de 52 páginas, vendiendo certezas que no existen, y posee una clara animosidad a favor del genocidio encubierto que significa esta tecnología al servicio del mercado, con una ciencia mercenaria”.
Tscherrig es acusado de “obstruir” la comunicación con el Papa. El Vaticano ofreció, en cambio, una reunión con Peter Turkson, presidente del Pontificio Consejo de Justicia y Paz, que fue rechazada por el grupo de científicos y abogados de distintas nacionalidades.
Una de las integrantes del grupo, la abogada ambientalista argentina Graciela Gómez, señaló a NOVA que, pese a que hace dos meses presentaron un escrito en la Nunciatura argentina, la carta al Papa nunca fue entregada. “Quieren impedir que nos reunamos con Francisco para tratar el tema de los Organismos Modificados Genéticamente (OMG) y llevarle documentos”, acusó.
Gómez fue una de las que participó del encuentro con el Pontífice el año pasado. Ahora sostiene que “desde el Vaticano nos ofrecen reunirnos con ese Concejo, pero no con el Papa, a lo que nos negamos rotundamente”.
La letrada agregó que el grupo, de mayoría italiana, posee un documento del año 2009 en el que Vaticano, aconsejado por científicos pro-OGM, redactó una manifestación a favor de lo que ella llama un “genocidio, creyendo que es la salvación para el hambre del mundo”.
“En Argentina hay un gran escándalo por la supuesta carta falsa del papa Francisco enviada a nuestra presidenta (Cristina Kirchner)”, dijo Gómez, y aseguró que “lo mismo sucedió con nuestra misiva”. “Esperamos la renuncia o el despido de alguno, hay una interna entre los obispos y los secretarios que quedó al descubierto”, diagnosticó.
“Nuestra carta nunca fue entregada y hay una clara animosidad para evitar que nos reunamos con el Papa”, enfatizó Graciela Gómez, que cuestionó que el Consejo de Paz y Justicia del Vaticano, que encabeza Turkson, haya felicitado el año pasado a los ganadores del Premio a la Alimentación, Monsanto y Syngenta. De esta manera, cuestionaron, los galardonados quedarían equiparados a los científicos que se oponen al modelo agropecuario.
“La soberanía alimentaria, los envenenamientos masivos y los daños en la salud humana que aquejan en el mundo y a poblaciones enteras no deben soslayarse”, dijo Gómez, que sostuvo que Argentina “es comparable a una Auswitch a cielo abierto, víctima del envenenamiento masivo con agrotóxicos, usados en la tan ‘inofensiva’ carrera de los OGM que tan livianamente apoyó en el año 2009 el Vaticano”.
Gómez asegura que el texto del Vaticano que está en poder del grupo de científicos “derrocha falacias a lo largo de 52 páginas, vendiendo certezas que no existen, y posee una clara animosidad a favor del genocidio encubierto que significa esta tecnología al servicio del mercado, con una ciencia mercenaria”.
Fuente: NOVA Argentina
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